El correcalles (Juego de saltar)

Juegan todos los niños que quieran. Se juega en la calle. En un principio, se colocan en plan burro –es decir, con las piernas rectas, doblada la espalda y las manos apoyadas en sus rodillas- los niños que hacen de tales –de burros-.  Cada uno a una distancia considerable del otro –como un par de metros- para que el saltador tenga sitio suficiente entre uno y otro.
El que ha salido elegido como primer saltador tiene que hacer eso, saltar, apoyando las dos manos a la vez y con las piernas abiertas, por encima del primero de los burros. A continuación por el siguiente, y así hasta llegar al final de la fila de rebuznadores. Entonces, debe colocarse él de burro. Los niños, conforme van siendo saltados, tienen que levantarse, pasar a ser humanos, y saltar a su vez toda la fila.

Si cuando estás saltando te caes, no sabes hacerlo… o le das una patada al sufrido animal, pierdes, y pasas a convertirte en burro, colocándote al final de la fila.



[Fuente: recuerdos de mi infancia; ilustración: mi hijo Jorge]